Hay momentos en que los artistas (no solo los escritores) tienen que tomar la decisión de seguir o abandonar. Te aconsejamos que no lo abandones, así que déjanos motivarte para seguir adelante:
Convertirte en un escritor exitoso es un proceso largo
No es algo que pueda suceder de la noche a la mañana. Aunque hay casos excepcionales, la mayoría de las personas tienen que trabajar fuerte para lograrlo. Es un proceso en el que se necesitan años para ver las recompensas de tu trabajo.
Fallar hace parte del proceso
Es una verdad desalentadora de escuchar, pero el fracaso es necesario. La crítica constructiva es necesaria. Casi todos los escritores han sido rechazados en algún momento de sus carreras. Pero ellos no fracasaron porque lo siguieron intentando. Habrá momentos buenos y malos, como en todo. Es un proceso normal.
Si sigues intentando y sigues trabajando en mejorar tarde o temprano serás exitoso. Recuerda que solo pierdes si te das por vencido.
Siempre habrá reveses
Habrá muchas metas que no podrás alcanzar en el momento que deseas, habrá problemas familiares, habrán eventos inesperados, enfermedades, tristezas, otras prioridades, y otro sinfín de cosas. Lo importante es que siempre tengas presente que todo eso pasará. Puede que te alejen de tus metas por un tiempo, pero siempre puedes volver a ellas.
Una piedra en tu camino no significa que fallaste. Ajustar tus metas y darte más tiempo para lograrlas no significa que fallaste. Si no lograste completar nada de lo que te propusiste este año no significa que fallaste. Cada día es una nueva oportunidad para empezar.
Al igual que con nuestras historias, hay muchas cosas que suceden sin que las hayamos planeado, pero eso no debe significar que tienes que darte por vencido. Recuerda por cuantos problemas hiciste pasar a tus personajes antes de dejarlos convertirse en lo que debían llegar a ser para alcanzar sus metas.
Todo valdrá la pena una vez que empieces a sentir que todo está encajando
Llegar a ser lo que queremos ser requiere de mucho tiempo y paciencia. Aun así, es muy satisfactorio cuando los pequeños detalles de tu vida empiezan a encajar. Alcanzar pequeñas metas te ayudan a cimentar tus metas más grandes. Una vez termines un borrador de tu historia puedes empezar a editar, una vez termines de editar puedes enviar tu trabajo a las editoriales. Un paso lleva a otro.
Imagen: photosteve 101 (vía flickr)